domingo, 31 de enero de 2010

Espejo que busca Empleo

Perdonen, que no los imite hoy. ¿Pero que van a pensar? Así no conseguiré otro trabajo...Sólo tengo que reflejar, pero estoy tan acostumbrado a que mi jefe me hable y espere mi respuesta.

¿Qué dicen? quieren conocer mi historia? Bueno es un poco confusa, pero ponganse cómodos...



Todo empezó hace muchos años, yo era el más extraño de todos. El único espejo que podía hablar, y que podía ver otros lugares aparte de sólo copiar las facciones de otros. También tenía mi propia personalidad. Mi anigua patrona se enamoró de mi en un instante.



Al principio me sentí emocionado... Una mujer bellísima que se acababa de casar con un viudo rey, me compró por unas monedas de oro a mi fabricante y ahora todos (el rey tenía una tierna niña de 8 años y cabellos negros) estábamos en el mismo palacio, rodeado por un bosque frondoso. Yo estaba colgado en la alcoba principal, donde la nueva reina estudiaba sus facciones con cuidado todos los días.



Pienso que fue mi culpa. Yo la malcrié...Todas las mañanas le decía que era la más hermosa del reino, y como nosotros los espejos no podemos mentir, ella creía cada palabra que yo decía, inflando su ego.



La tragedia llegó a palacio... El rey falleció al poco tiempo de mi llegada y a pesar de una sonrisa siniestra en el rostro de mi ama, ella seguía siendo lo más bello en el reino. No entendía a que se debía el olor a manzanas en el cuarto del rey.



Los años se hicieron rutinarios, todas las mañanas mi ama me preguntaba, sin esperar a que yo lo diga, quién era la más bella de todas. Extrañamente ella había asumido una molesta costumbre... todo me lo preguntaba en verso y me obligaba a responderle de igual manera. Como ustedes saben, nosotros los espejos no podemos arriesgarnos a ser rotos por nuestros amos si es que no se obedece ciegamente cada capricho. Somos muy complacientes. Está en el reglamento aprobado de espejos (y aunque sea mágico, no me salvo de cumplirlo) "Un espejo no miente, un espejo no improvisa...Un espejo imita con verdad y muestra la realidad"



Un día, justo en el cumpleaños 16 de la joven hijastra de mi ama, cumplimos con nuestra rutina diaria. La reina me preguntó y yo respondí. Sólo desearía haber podido responder mintiendo. Por lo menos tendría aún empleo... este.... no... mejor no... olviden lo último. Bueno continuando con mi historia de vida, yo le respondí a mi reina que la más bella ya no era ella. Ese título ahora le pertenecía a su pequeña hijastra. Para evitar problemas, solo dire sus iniciales S.W. (algunas personas lo escriben mal diciendo B.N.).



Ustedes comprenderán que para una mujer que bordea los 40 años, con ciertas actitudes propias de la edad, no es muy fácil ser reemplazada por otra mujer. Si bien mi ama seguía siendo hermosa, durante los años que pasamos juntos, toda la fortuna de su difunto esposo se gastó para mantener esa belleza con botox, cremas, cirugías y muchas otras cosas. Sí era bella, pero ya no era una belleza natural. Es por eso mis fachas... yo tenía un marco de oro, pero cuando tuvo que pagar una liposucción me cambió el marco por uno bañado en oro. Disculpen mi indiscresión... ya les dije que no sé mentir.



Después de ese día mi ama se obsecionó. Mandó a la pequeña al bosque, con la esperanza que el cazador la asesine, pero éste regreso con una excusa que le costó la vida. Lo mejor fue que durante un tiempo la reina no se le ocurrió preguntarme dónde estaba su hijastra, pero sí me preguntaba si ella seguía siendo la más hermosa o si mi ama había recuperado su puesto (Recuerden, ella me preguntaba si era la más bella del reino, no del mundo. Si me hubiese preguntado eso, yo estaría roto por mencionar algunos nombres como Cindy, Naomi, Viviana o alguna otra modelito o actriz que tanto aparecen en las revistas). Cuando escuchaba mi respuesta: S.W. ella entraba en un ataque de histeria, no muy notorio puedo añadir porque el botox no le permtía mostrar emociones en su rostro. Fue un alivio que sólo preguntó dónde estaba su hijastra y no donde dormía, porque de lo contrario tendría que haber dicho que la muchacha de cabellos negros dormía en la cama de 7 pequeños hombres, pero no con ellos... creo que se podría haber mal interpretado.



Mi ama, en su vanidad mostró sus verdaderos colores. Usando su maestría en pociones y venenos que estudio en cierto colegio oculto en Reino Unido (no recuerdo el nombre, pero su escudo tenía una serpiente, un león, un águila y un tejón), se disfrazó en una horrenda pordiosera que llevaba una canasta con manzanas (ahora sí podría decir que se parecía a su yo interno, pero no debo hablar mal de mis jefes, no se ve bien en los currículums). Algo comentó cuando se iba, algo acerca de que no le interesaban los corazones pues se desvanecían rápido, y cosas que no entendí sobre la belleza. Me hizo sentir como cierto retrato de un tal Dorian Gray.



Nunca regresó. Mi ama debe ahora estar en la panza de un buitre o algo así. Escuché que S.W. se casó con un principe y que contrató a los 7 pequeños hombres como mineros reales, o algo así. Los encargados de las cobranzas, vinieron y desmantelaron el palacio para pagar las deudas de mi ama.



Lo demás se puede deducir. Me quedé sin trabajo. Sigo a la espera de una llamada que me ayude a pagar las deudas. Pero mientras piensan si me contratan o no, sírvanse una manzanita. Son las mismas que mi ama le regaló a su esposo.


La imagen es de http://linzee777.deviantart.com/art/Mirror-Mirror-On-the-Wall-133303140
Stcok image by http://linzee777.deviantart.com/art/Mirror-Mirror-On-the-Wall-133303140

4 comentarios:

Azul dijo...

No se cuantas manzanas me podra invitar ...el !Espejo!...Si es tan sincero ...mas vale conocerlo.

Ýulian Doriet dijo...

jajajaja uno siempre se fija en los personajes centrales de la historia, pero siempre nos olvidamos de la vida de los secundarios, suele ser màs interesante que la de los protagonistas

Mrah. dijo...

Que increíble, nunca se me hubiera ocurrido ver desde ese ángulo al espejo... me encanta.

Karina Florez Chokewanca dijo...

jajajajaja, pucha, nunca me puse a pensar cómo había quedado el pobre espejo...bueno, bueno, tu entrada me encantó. Creo que contrataré al espejo.
saluditos
Kiri