Yazmín Sabla Pérez, me retaste con una palabra ponzoñosa... CHISME. Espero te agrade lo que salió.
CHISME
¡Traigan el antídoto!
Rápido antes que el veneno surta efecto.
Este chisme es fuerte, pero ella parece serlo más.
Fue afortunada, no le hizo tanto caso al chisme.
El veneno no invadió completamente su corazón
¡Aún hay esperanzas!
¡Rápido!
Conecten la intravenosa directamente a su alma.
Debemos evitar que lo que se dijo se reproduzca en su sistema.
Enfermera, necesitaré 100 miligramos de verdad
y también 500 miligramos de confianza.
Yo succionaré la substancia negra que corre por sus arterias.
Enfermera, cúbrale los oídos con un poco de razón.
No permita que los ojos vean mentiras.
Parece que hace efecto.
Necesitaré otro recipiente.
La infección del chisme creció mucho en su interior.
Ella es fuerte. Está luchando.
No quiere creer en el chisme.
Su sistema está expulsando toda la ponzoña.
Enfermera, creo que la salvamos.
Déjenla dormir.
El antídoto aún debe purgar toda presencia nociva.
Deshágase de estos dos recipientes. No vaya a ser que el chisme contagie a alguien más.
La sangre hierve para crear con tinta, con lengua veloz, con mano ágil. No cuesta ver el mundo con un poco de sano sarcasmo...
lunes, 30 de junio de 2014
ANULADO
Ileana Gold Pérez, salió algo bonito y personal con ANULADO. Escrito el 30 de mayo de 2014.
ANULADO
¡Lo conseguimos! ¡Eureka!
Hemos anulado los efectos de la tristeza que llegó sin ser invitada.
Juntos lo logramos.
Hemos anulado esas consecuencias de lágrimas y dolor.
Esa oración que encontramos en el marcador de libros nos sirvió.
Revertimos la devastación que causó la soledad.
Anulado está el contrato que se firmó con gotas de sangre.
Ese contrato que nadie podía romper.
Nuestros recuerdos nos permitieron ese vacío legal que encontramos en ese documento.
Nos costó mucho trabajo.
Tuvimos que negociar con los “cuchurrominos” que nos invadieron desde pequeños.
Tuviste que viajar por todas partes, para encontrar aliados.
La ley es clara.
No hay tristeza eterna.
Pero pudimos reducir nuestra condena.
Tú, hija de una princesa, te volviste bruja.
y con los poderes que tus dientes mostraban en una sonrisa
lograste anular esta pena.
Tuvimos que pedirle apoyo a los peluches.
Si no eran ellos, ¿quién iba a cuidarnos?
Tuviste que abandonar el castillo de la familia,
pero ahora celebramos con caballos de paso.
¡Hemos anulado los efectos de la tristeza!
Que florezca la flor, símbolo de nuestra libertad.
Enciende la antorcha para que podamos ver,
porque anulamos el contrato que todos firmamos a ciegas.
ANULADO
¡Lo conseguimos! ¡Eureka!
Hemos anulado los efectos de la tristeza que llegó sin ser invitada.
Juntos lo logramos.
Hemos anulado esas consecuencias de lágrimas y dolor.
Esa oración que encontramos en el marcador de libros nos sirvió.
Revertimos la devastación que causó la soledad.
Anulado está el contrato que se firmó con gotas de sangre.
Ese contrato que nadie podía romper.
Nuestros recuerdos nos permitieron ese vacío legal que encontramos en ese documento.
Nos costó mucho trabajo.
Tuvimos que negociar con los “cuchurrominos” que nos invadieron desde pequeños.
Tuviste que viajar por todas partes, para encontrar aliados.
La ley es clara.
No hay tristeza eterna.
Pero pudimos reducir nuestra condena.
Tú, hija de una princesa, te volviste bruja.
y con los poderes que tus dientes mostraban en una sonrisa
lograste anular esta pena.
Tuvimos que pedirle apoyo a los peluches.
Si no eran ellos, ¿quién iba a cuidarnos?
Tuviste que abandonar el castillo de la familia,
pero ahora celebramos con caballos de paso.
¡Hemos anulado los efectos de la tristeza!
Que florezca la flor, símbolo de nuestra libertad.
Enciende la antorcha para que podamos ver,
porque anulamos el contrato que todos firmamos a ciegas.
MENTIRAS
Franco Martinez, tu palabra me hizo escribir algo burlón. Espero te guste. Escrito el 30 de mayo de 2014.
MENTIRAS
El sol se ha congelado,
los cerdos volarán hacia el sur. No soportan el frío
He escuchado que los niños llegan en cigüeña desde París.
Mentiras que se vuelven verdad.
Vamos, cuéntame una de vaqueros.
La sal es dulce como la miel.
Pinnochio se hizo una cirugía plástica para achicar su nariz.
Sacó una cita para el 30 de febrero de este año.
Las truchas corren por las montañas;
las liebres decidieron nadar contra el río.
¡Vayamos a comer queso! La luna está hecha de eso.
El fuego no quema;
el agua está seca.
Es hora de creer en las mentiras.
Mirémonos al espejo…nada de lo que vemos es como es.
En el mundo del revés, nuestras mentiras se hacen realidad.
La verdad es relativa.
Corran mentiras. Sus patas cortas las llevarán lejos.
Corramos con ellas, mientras le sacas sangre a las piedras.
No tenemos que preocuparnos.
El dinero crece en los árboles
y los niños nunca crecen.
Tiremos nuestras perlas a los chanchos. Las necesitarán para su largo viaje.
Te invito una pera que obtuve de aquel Olmo.
Es hora de contar mentiras,
blancas y negras.
Después de todo lo visto, si creemos en nuestras mentiras, serán verdad.
¡Sigamos poniendo nuestra fe en lo primero que aparece!
En el mundo del revés, nada es lo que es.
BYE
La imagen la encontré en http://www.texasfred.net/archives/17769/flying-pigs
MENTIRAS
El sol se ha congelado,
los cerdos volarán hacia el sur. No soportan el frío
He escuchado que los niños llegan en cigüeña desde París.
Mentiras que se vuelven verdad.
Vamos, cuéntame una de vaqueros.
La sal es dulce como la miel.
Pinnochio se hizo una cirugía plástica para achicar su nariz.
Sacó una cita para el 30 de febrero de este año.
Las truchas corren por las montañas;
las liebres decidieron nadar contra el río.
¡Vayamos a comer queso! La luna está hecha de eso.
El fuego no quema;
el agua está seca.
Es hora de creer en las mentiras.
Mirémonos al espejo…nada de lo que vemos es como es.
En el mundo del revés, nuestras mentiras se hacen realidad.
La verdad es relativa.
Corran mentiras. Sus patas cortas las llevarán lejos.
Corramos con ellas, mientras le sacas sangre a las piedras.
No tenemos que preocuparnos.
El dinero crece en los árboles
y los niños nunca crecen.
Tiremos nuestras perlas a los chanchos. Las necesitarán para su largo viaje.
Te invito una pera que obtuve de aquel Olmo.
Es hora de contar mentiras,
blancas y negras.
Después de todo lo visto, si creemos en nuestras mentiras, serán verdad.
¡Sigamos poniendo nuestra fe en lo primero que aparece!
En el mundo del revés, nada es lo que es.
BYE
La imagen la encontré en http://www.texasfred.net/archives/17769/flying-pigs
ÉTICA
Diana Alcántara Loli, tu palabra ética fue retadora...Escrito el 30 de mayo de 2014
ÉTICA
Sherlock Holmes y Watson están en el caso.
Buscan sin cesar la ética desaparecida.
Por las joyas de la corona,
el caso es complicado.
Muchos sospechosos y poco tiempo para investigar.
“Watson, no podemos descartar nada. Me niego a creer que la asesinaron.
No hemos encontrado el cuerpo”.
Pero por el tiempo invertido,
no se puede descartar el asesinato.
¿Quién asesinó la ética?
¿Será el jefe que se aprovecha de su puesto para conseguir algo con su asistente?
¿Será aquel que contrató a su hermano sin evaluar a otros candidatos?
¿Será aquella vendedora que tiene conflictos de interés?
En algún lugar se encuentra el asesino o el secuestrador.
Nadie ha pedido rescate…
¿Será que la ética se desapareció a sí misma?
Sherlock está confundido.
Watson no sabe qué pensar.
La ética ha desaparecido y no hay muchas pistas que seguir.
La última vez que la vieron,
fue aquella vez que una mujer se negó a aceptar un trabajo
porque no estaba de acuerdo con los medios de sus empleadores.
La Reina ha autorizado una recompensa.
¿Quién ha visto la ética?
Watson, no se desanime.
La búsqueda debería ser elemental.
Los sabuesos no encuentran el aroma.
La lista de sospechosos aumenta con cada minuto,
cada uno de ellos y ellas tienen una coartada creíble.
¡Busquen en los cementerios!
¡Busquen en los bancos y teatros!
¡En algún lugar deberá estar!
ÉTICA
Sherlock Holmes y Watson están en el caso.
Buscan sin cesar la ética desaparecida.
Por las joyas de la corona,
el caso es complicado.
Muchos sospechosos y poco tiempo para investigar.
“Watson, no podemos descartar nada. Me niego a creer que la asesinaron.
No hemos encontrado el cuerpo”.
Pero por el tiempo invertido,
no se puede descartar el asesinato.
¿Quién asesinó la ética?
¿Será el jefe que se aprovecha de su puesto para conseguir algo con su asistente?
¿Será aquel que contrató a su hermano sin evaluar a otros candidatos?
¿Será aquella vendedora que tiene conflictos de interés?
En algún lugar se encuentra el asesino o el secuestrador.
Nadie ha pedido rescate…
¿Será que la ética se desapareció a sí misma?
Sherlock está confundido.
Watson no sabe qué pensar.
La ética ha desaparecido y no hay muchas pistas que seguir.
La última vez que la vieron,
fue aquella vez que una mujer se negó a aceptar un trabajo
porque no estaba de acuerdo con los medios de sus empleadores.
La Reina ha autorizado una recompensa.
¿Quién ha visto la ética?
Watson, no se desanime.
La búsqueda debería ser elemental.
Los sabuesos no encuentran el aroma.
La lista de sospechosos aumenta con cada minuto,
cada uno de ellos y ellas tienen una coartada creíble.
¡Busquen en los cementerios!
¡Busquen en los bancos y teatros!
¡En algún lugar deberá estar!
LOCURA
Patricia Malone Raygada, tu palabra me sirvió para crear un backstory a un personaje que cree. Gracias!! Se escribió el 30 de mayo de 2014.
LOCURA
Los especialistas no pudieron explicar las causas de su locura. No se encontraba coherencia con lo que decía. Las frases que repetía parecían no tener relación alguna entre sí. Según las grabaciones encontradas en la oficina del director de la institución mental, todas las declaraciones parecían contener la frase: “y no podía dejar de ver esos ojos verdes”.
El nuevo interno había llegado la noche anterior. Se hizo una investigación sobre los antecedentes, teniendo en cuenta la información en los documentos que traía consigo y no se demostró causa plausible a tremenda locura. Las enfermeras no habían visto un caso así en todas sus carreras: espuma salía por su boca; la mirada era vacía y los ojos se movían de un lado a otro; el interno llegó traído a la fuerza por la policía, lanzando carcajadas mientras se resistía al ingreso. Parecía que su mente se hubiese desconectado.
***
Seraph Angelove no había querido hacer eso. Otra vez ocurrió lo que él tanto temía. Tenía 17 años y aún recordaba cómo ocurrió la primera vez. No pudo evitarlo, aquel hombre lo había irritado demasiado y Seraph hizo lo que se esperaba en esa situación: perder el control en una ira ciega.
El hombre había pasado gran parte del tiempo (escasos quince minutos) hostigando a Seraph por cualquier motivo: sus cabellos rojos en un estilo afro, sus ojos verdes (que parecían lanzar destellos de electricidad), su delgadez, su voz de niña e incluso su ropa multicolor (podría tratarse de un caleidoscopio para ser justos).
Seraph estaba en un Starbucks, comprando un café cuando aquel hombre se dispuso a estar en el peor lugar durante la peor circunstancia. Seraph nunca había sido muy paciente. Se podría decir que su ropa extravagante, su peinado o sus ojos saltones eran muestra de que miles de cosas pasaban a la vez por su mente.
Los insultos siguieron en susurros. Aquel hombre era astuto. No permitiría que los dependientes que cobraban y entregaban el café se dieran cuenta de su actitud. Después de todo, solo buscaba divertirse un rato y a pesar de la extraña apariencia, Seraph parecía un adolescente delicado e inofensivo.
Seraph dejó su café en el mostrador y volteó a mirar al hombre. La sonrisa que su rostro era tan abierta que parecía demencial. El hombre dudó por unos cuantos latidos de corazón, pero lanzó su estocada mayor al decirle a Seraph que era una mariquita. Los ojos de Seraph se abrieron, amplificando la sensación de que en cualquier momento saltarían fuera de su cráneo. Su sonrisa se volvió más perturbadora, bordeando en un placer psicótico. Todo fue tan rápido. El hombre no podía dejar de mirar esos ojos verdes. En su cabeza veía como sus pensamientos se derretían y se mezclaban con sus miedos y con todas las pesadillas que alguna vez haya tenido. Lo único coherente que quedó en su cerebro fue la imagen de esos ojos verdes, hipnóticos y enloquecedores.
Seraph, volteó y recogió su café. Agradeciendo al cajero sus atenciones, salió del local. A unos cuantos pasos, pudo oír cómo aquel hombre comenzó a reír sin control. Por la ventana vio con una expresión curiosa, como se trepaba en las mesas y cómo los empleados intentaban de todo para que no lastimara a los otros clientes, quienes mostraban un terror indescriptible en sus rostros.
-“Buenas noches, idiota. Disfruta tu café.”-Seraph le dio un sorbo a su cappuccino y se alejó del lugar como si nada hubiese pasado, mientras se ponía los audífonos y encendía su reproductor de música.
***
Los testimonios de los trabajadores de la popular cafetería no ayudaban a aclarar los hechos. Aparentemente el hombre estuvo conversando con un joven, pero hablaba tan bajo que nadie pudo escuchar lo que decía. Según el cajero de turno, el chico solo volteó a sonreírle al hombre, como si una broma se hubiese dicho. Unos segundos después se despidió y abandonó el local. No habría motivo para saber qué hubiese pasado para que este hombre tuviera tal crisis psicótica.
La doctora a cargo no tuvo otra opción que sedar al hombre. Lo único raro era que las descripciones de los testigos coincidían en algo: el joven tenía unos ojos de color verde intenso, como si estuvieran recargados de alguna energía ilimitada, pero se asume que esa energía es normal en cualquier adolescente.
***
-“Otra vez pasó. La primera vez fue con mis padres, hace ya tantos años. De esa noche no recuerdo nada excepto que mi mamá perdió la razón y mi papá comenzó a comportarse como un chimpancé. Igual que esa vez, pude ver la mente de ese idiota y llegar a su centro. No sé cómo, pero pude desactivar su cerebro. No es que pensara mucho que digamos, pero pude verme en su mente bajando una palanca.”- Seraph se encontraba sentado en una banca de un parque de Santiago de Surco hablando para sí. Su cappuccino estaba a la mitad.
Para él no era secreto lo que había pasado. El tenía la habilidad de enloquecer a los demás con tan solo mirar a los ojos. Así fue como pudo evitar que lo mandaran a un orfanato cuando sus padres fueron internados en el Larco Herrera por los responsables del Bienestar Social del Menor. Era esa habilidad que le permitía obtener lo que quisiera: comida, ropa, hospedaje y otras cosas. Desde muy pequeño lo había entendido y siempre había utilizado su habilidad en dosis pequeñas, creando pequeñas ilusiones en las mentes más débiles. Pero esta noche había perdido todo control. Él sabía que cuando “esa palanca” se bajaba ni él podía subirla de nuevo, por lo menos no en su actual edad.
Algo en él le decía que tenía que ubicar a tres personas más, personas como él y a la vez distintas, pero mientras tanto, para no perder el control otra vez sobre su poder de locura, debería encerrarse a sí mismo. Claro que sería una precaución mínima, pues con sus habilidades podría salir en cualquier momento.
Mientras esperaba a esas 3 personas, sería interesante ver qué pasaba si él se ingresaba en alguna casa de locos. Poniéndose de pie, comenzó su caminata hacia la clínica mental en la que estaban sus padres.
Fingiría una locura tan creíble que deberían internarlo. Pasó por un poste que tenía un afiche con la imagen de una gitana. Intrigado, arrancó el afiche y lo guardó. La persona en ese afiche le parecía conocida. –“MMMM, Celeste…algo me dice que nos conoceremos pronto.” Mientras una nube cubría la luna y la música continuaba sonando en los audífonos de Seraph, él se alejó del parque, rumbo Magdalena del Mar.
LOCURA
Los especialistas no pudieron explicar las causas de su locura. No se encontraba coherencia con lo que decía. Las frases que repetía parecían no tener relación alguna entre sí. Según las grabaciones encontradas en la oficina del director de la institución mental, todas las declaraciones parecían contener la frase: “y no podía dejar de ver esos ojos verdes”.
El nuevo interno había llegado la noche anterior. Se hizo una investigación sobre los antecedentes, teniendo en cuenta la información en los documentos que traía consigo y no se demostró causa plausible a tremenda locura. Las enfermeras no habían visto un caso así en todas sus carreras: espuma salía por su boca; la mirada era vacía y los ojos se movían de un lado a otro; el interno llegó traído a la fuerza por la policía, lanzando carcajadas mientras se resistía al ingreso. Parecía que su mente se hubiese desconectado.
***
Seraph Angelove no había querido hacer eso. Otra vez ocurrió lo que él tanto temía. Tenía 17 años y aún recordaba cómo ocurrió la primera vez. No pudo evitarlo, aquel hombre lo había irritado demasiado y Seraph hizo lo que se esperaba en esa situación: perder el control en una ira ciega.
El hombre había pasado gran parte del tiempo (escasos quince minutos) hostigando a Seraph por cualquier motivo: sus cabellos rojos en un estilo afro, sus ojos verdes (que parecían lanzar destellos de electricidad), su delgadez, su voz de niña e incluso su ropa multicolor (podría tratarse de un caleidoscopio para ser justos).
Seraph estaba en un Starbucks, comprando un café cuando aquel hombre se dispuso a estar en el peor lugar durante la peor circunstancia. Seraph nunca había sido muy paciente. Se podría decir que su ropa extravagante, su peinado o sus ojos saltones eran muestra de que miles de cosas pasaban a la vez por su mente.
Los insultos siguieron en susurros. Aquel hombre era astuto. No permitiría que los dependientes que cobraban y entregaban el café se dieran cuenta de su actitud. Después de todo, solo buscaba divertirse un rato y a pesar de la extraña apariencia, Seraph parecía un adolescente delicado e inofensivo.
Seraph dejó su café en el mostrador y volteó a mirar al hombre. La sonrisa que su rostro era tan abierta que parecía demencial. El hombre dudó por unos cuantos latidos de corazón, pero lanzó su estocada mayor al decirle a Seraph que era una mariquita. Los ojos de Seraph se abrieron, amplificando la sensación de que en cualquier momento saltarían fuera de su cráneo. Su sonrisa se volvió más perturbadora, bordeando en un placer psicótico. Todo fue tan rápido. El hombre no podía dejar de mirar esos ojos verdes. En su cabeza veía como sus pensamientos se derretían y se mezclaban con sus miedos y con todas las pesadillas que alguna vez haya tenido. Lo único coherente que quedó en su cerebro fue la imagen de esos ojos verdes, hipnóticos y enloquecedores.
Seraph, volteó y recogió su café. Agradeciendo al cajero sus atenciones, salió del local. A unos cuantos pasos, pudo oír cómo aquel hombre comenzó a reír sin control. Por la ventana vio con una expresión curiosa, como se trepaba en las mesas y cómo los empleados intentaban de todo para que no lastimara a los otros clientes, quienes mostraban un terror indescriptible en sus rostros.
-“Buenas noches, idiota. Disfruta tu café.”-Seraph le dio un sorbo a su cappuccino y se alejó del lugar como si nada hubiese pasado, mientras se ponía los audífonos y encendía su reproductor de música.
***
Los testimonios de los trabajadores de la popular cafetería no ayudaban a aclarar los hechos. Aparentemente el hombre estuvo conversando con un joven, pero hablaba tan bajo que nadie pudo escuchar lo que decía. Según el cajero de turno, el chico solo volteó a sonreírle al hombre, como si una broma se hubiese dicho. Unos segundos después se despidió y abandonó el local. No habría motivo para saber qué hubiese pasado para que este hombre tuviera tal crisis psicótica.
La doctora a cargo no tuvo otra opción que sedar al hombre. Lo único raro era que las descripciones de los testigos coincidían en algo: el joven tenía unos ojos de color verde intenso, como si estuvieran recargados de alguna energía ilimitada, pero se asume que esa energía es normal en cualquier adolescente.
***
-“Otra vez pasó. La primera vez fue con mis padres, hace ya tantos años. De esa noche no recuerdo nada excepto que mi mamá perdió la razón y mi papá comenzó a comportarse como un chimpancé. Igual que esa vez, pude ver la mente de ese idiota y llegar a su centro. No sé cómo, pero pude desactivar su cerebro. No es que pensara mucho que digamos, pero pude verme en su mente bajando una palanca.”- Seraph se encontraba sentado en una banca de un parque de Santiago de Surco hablando para sí. Su cappuccino estaba a la mitad.
Para él no era secreto lo que había pasado. El tenía la habilidad de enloquecer a los demás con tan solo mirar a los ojos. Así fue como pudo evitar que lo mandaran a un orfanato cuando sus padres fueron internados en el Larco Herrera por los responsables del Bienestar Social del Menor. Era esa habilidad que le permitía obtener lo que quisiera: comida, ropa, hospedaje y otras cosas. Desde muy pequeño lo había entendido y siempre había utilizado su habilidad en dosis pequeñas, creando pequeñas ilusiones en las mentes más débiles. Pero esta noche había perdido todo control. Él sabía que cuando “esa palanca” se bajaba ni él podía subirla de nuevo, por lo menos no en su actual edad.
Algo en él le decía que tenía que ubicar a tres personas más, personas como él y a la vez distintas, pero mientras tanto, para no perder el control otra vez sobre su poder de locura, debería encerrarse a sí mismo. Claro que sería una precaución mínima, pues con sus habilidades podría salir en cualquier momento.
Mientras esperaba a esas 3 personas, sería interesante ver qué pasaba si él se ingresaba en alguna casa de locos. Poniéndose de pie, comenzó su caminata hacia la clínica mental en la que estaban sus padres.
Fingiría una locura tan creíble que deberían internarlo. Pasó por un poste que tenía un afiche con la imagen de una gitana. Intrigado, arrancó el afiche y lo guardó. La persona en ese afiche le parecía conocida. –“MMMM, Celeste…algo me dice que nos conoceremos pronto.” Mientras una nube cubría la luna y la música continuaba sonando en los audífonos de Seraph, él se alejó del parque, rumbo Magdalena del Mar.
TE EXTRAÑARÉ
Claudita Tasayco,
aprovecharé la frase que me diste TE EXTRAÑARÉ para dedicar una carta
genérica a todos los amigos con los que nos hemos tenido que separar
porque nuestros caminos se alejaron un poco. Con la esperanza que se
vuelvan a cruzar...
TE EXTRAÑARÉ
Querido amigo, duelen las despedidas. No intentes detenerme. Debo seguir mi camino, no el tuyo. Debo alejarme de esta tierra que me vio nacer y crecer. Sé que conversamos varias veces al respecto y que no estás de acuerdo con mi decisión, pero agradezco que la respetes. Te extrañaré mucho.
¿Cuántas veces hemos sido cómplices de travesuras de héroes y villanos en nuestra infancia? Siempre serás el confidente más grande. ¡Los secretos que compartimos! Las confesiones del primer amor. Te extrañaré, mi buen amigo. Extrañaré tus palabras antes del amanecer y tus consejos (acertados y los no tanto). Esta tierra me dio todo lo que me podría ofrecer.
Te extrañaré, querido compinche. No creo poder verte otra vez, pues tu camino y el mío ya se alejan de su centro, aunque no sé cuándo, nuestros caminos se podrán cruzar nuevamnete. Siempre seremos niños grandes. Siempre estarás en mi memoria. Aún recuerdo como nos conocimos, por “mera casualidad”, pero empezamos la amistad por elección propia.
Te extrañaré amigo mío, pero debes entender que alargar más esta despedida no nos hará crecer ni nos beneficiará nunca.
Querido amigo, sé que al principio me extrañarás pero recuerda que es tiempo de seguir adelante. Ya lo hemos conversado hasta altas horas de la noche.
Extrañaré nuestras cacerías por las noches. Esas cacerías de anécdotas y los planes que nacen en la imaginación de un niño al jugar. Todas esas promesas que cada uno se hizo así mismo y que ahora parecen tan difíciles de cumplir. Olvidemos los errores cometidos.
Te extrañaré amigo, pero por ahora digamos un hasta luego, hasta que los recuerdos se hagan menos difusos y caminemos en zigzag por los caminos que nos tocaron recorrer. Se cruzarán ahora estoy seguro de ello.
No digamos adiós. Digamos te veo luego.
Te extrañaré ahora y hasta que nuestros caminos encuentren nuevamente la intersección.
BYE
La imagen fue dibujada por mi amiga PsiqueChan para mi primer poemario.
TE EXTRAÑARÉ
Querido amigo, duelen las despedidas. No intentes detenerme. Debo seguir mi camino, no el tuyo. Debo alejarme de esta tierra que me vio nacer y crecer. Sé que conversamos varias veces al respecto y que no estás de acuerdo con mi decisión, pero agradezco que la respetes. Te extrañaré mucho.
¿Cuántas veces hemos sido cómplices de travesuras de héroes y villanos en nuestra infancia? Siempre serás el confidente más grande. ¡Los secretos que compartimos! Las confesiones del primer amor. Te extrañaré, mi buen amigo. Extrañaré tus palabras antes del amanecer y tus consejos (acertados y los no tanto). Esta tierra me dio todo lo que me podría ofrecer.
Te extrañaré, querido compinche. No creo poder verte otra vez, pues tu camino y el mío ya se alejan de su centro, aunque no sé cuándo, nuestros caminos se podrán cruzar nuevamnete. Siempre seremos niños grandes. Siempre estarás en mi memoria. Aún recuerdo como nos conocimos, por “mera casualidad”, pero empezamos la amistad por elección propia.
Te extrañaré amigo mío, pero debes entender que alargar más esta despedida no nos hará crecer ni nos beneficiará nunca.
Querido amigo, sé que al principio me extrañarás pero recuerda que es tiempo de seguir adelante. Ya lo hemos conversado hasta altas horas de la noche.
Extrañaré nuestras cacerías por las noches. Esas cacerías de anécdotas y los planes que nacen en la imaginación de un niño al jugar. Todas esas promesas que cada uno se hizo así mismo y que ahora parecen tan difíciles de cumplir. Olvidemos los errores cometidos.
Te extrañaré amigo, pero por ahora digamos un hasta luego, hasta que los recuerdos se hagan menos difusos y caminemos en zigzag por los caminos que nos tocaron recorrer. Se cruzarán ahora estoy seguro de ello.
No digamos adiós. Digamos te veo luego.
Te extrañaré ahora y hasta que nuestros caminos encuentren nuevamente la intersección.
BYE
La imagen fue dibujada por mi amiga PsiqueChan para mi primer poemario.
TENACIDAD
Alexandra Meneses, aquí está la palabra que me pediste: Tenacidad. Escritorio el 29.05.14
TENACIDAD
¡Disparad las flechas!
Que nada os detenga.
Recordaos que vuestra tenacidad tendrá recompensa.
Seguid con lo planeado, mis queridos súbditos.
¡No importan los obstáculos!
Todo será por un “bien mayor”.
¡No desesperéis!
Disparad las flechas hacia el norte.
Que vuestra esperanza no se vea nublada.
Seguid adelante, os ordeno.
Vuestra fidelidad es digna de mi admiración.
No os desaniméis. La muerte es solo un nuevo viaje.
¡Sacrificad vuestros miedos!
Nuestra meta está cerca.
¡Vosotros obtendréis la tierra para sus descendientes!
Pelead por nuestros sueños comunes.
Os suplico por todo lo sagrado
que me prestéis vuestra fuerza una vez más.
¡Derribad ese muro llamado Inhibición!
Levantaos y continuad.
Ya os dije: admiro vuestra tenacidad en la lucha.
Nuestro reino nos necesita.
Continuad sin dudar,
que el fruto a nuestro esfuerzo está cerca.
¡VICTORIA!
El reino vecino es nuestro. Sus tesoros están listos para ser compartidos.
La lucha llegó a su fin. Descansad. Os merecéis un digno descanso.
TENACIDAD
¡Disparad las flechas!
Que nada os detenga.
Recordaos que vuestra tenacidad tendrá recompensa.
Seguid con lo planeado, mis queridos súbditos.
¡No importan los obstáculos!
Todo será por un “bien mayor”.
¡No desesperéis!
Disparad las flechas hacia el norte.
Que vuestra esperanza no se vea nublada.
Seguid adelante, os ordeno.
Vuestra fidelidad es digna de mi admiración.
No os desaniméis. La muerte es solo un nuevo viaje.
¡Sacrificad vuestros miedos!
Nuestra meta está cerca.
¡Vosotros obtendréis la tierra para sus descendientes!
Pelead por nuestros sueños comunes.
Os suplico por todo lo sagrado
que me prestéis vuestra fuerza una vez más.
¡Derribad ese muro llamado Inhibición!
Levantaos y continuad.
Ya os dije: admiro vuestra tenacidad en la lucha.
Nuestro reino nos necesita.
Continuad sin dudar,
que el fruto a nuestro esfuerzo está cerca.
¡VICTORIA!
El reino vecino es nuestro. Sus tesoros están listos para ser compartidos.
La lucha llegó a su fin. Descansad. Os merecéis un digno descanso.
Pasión
Victor Gonzales
una de las personas que me han demostrado más pasión en su vida laboral
y en sus objetivos, te dejó un artículo escrito por mí, basado en la
palabra que me diste-Escrito el 29 de mayo de 2014.
PASIÓN
¿Quién no necesita la pasión en su vida? La necesitamos como una bebida energética al despertarnos. Sin la pasión necesaria, no lograríamos trabajar y lograr los objetivos ni tampoco conservar un amor o cuidar a la familia.
La mayoría de personas solo considera que existe la pasión que se le dedica a la pareja, pero existen otros tipos, igual de profundos para sentirse apasionado.
La pasión, por común acuerdo, nos mantiene activos en algunos ámbitos: Amor, deseo, gozo, odio, aversión y tristeza. Estos ámbitos incluyen todo en nuestra vida: las metas, el arte, la creatividad, el trabajo e incluso la muerte.
Es obvio que todos tenemos distintos receptores de nuestra pasión, pero la duda surge cuando nosotros decimos que ya no tenemos la pasión para continuar. ¿Cómo recuperar la pasión perdida? Buena pregunta.
La pasión perdida es la enfermedad que supera en infectados al estrés. Si perdemos la pasión en lo que hacemos, sea cual fuera la acción que realizamos, perdemos el sentido y el gusto por dicha actividad. Muchos expertos indican que una vez perdida la pasión, se debe ubicar otra fuente más poderosa.
Si se quiere comparar la pasión con alguna reacción biológica, sería conveniente asemejarla con la adrenalina. La adrenalina nos permite movernos para luchar o huir al temer. Pero a diferencia de la pasión, una de las reacciones incontrolables de la adrenalina es la parálisis completa.
Entonces, si la pasión es una emoción, ¿cómo volver a sentirla? No se puede duplicar las condiciones que crearon una emoción. La pasión, al igual que la mayoría de los sentimientos que duran, es fruto de una decisión constante de no perderla. No hay manuales al respecto (ni siquiera en los poemas más románticos o eróticos).
En los casos en los que se pierde la pasión, debemos ubicar esa “electricidad”, a falta de una mejor palabra, para recargar nuestra motivación. De eso depende nuestro éxito y confort.
Sabiendo eso, queda preguntarnos ¿por qué perdemos la pasión, si se trata, de una decisión? La respuesta más rápida sería echarle la culpa a la rutina. Pero considero que eso es una excusa, pues la vida está llena de rutinas que se repiten más de una vez. El punto es saber cómo hacer interesante la rutina. Lograr ese cometido es de lo que realmente trata la pasión.
BYE
PASIÓN
¿Quién no necesita la pasión en su vida? La necesitamos como una bebida energética al despertarnos. Sin la pasión necesaria, no lograríamos trabajar y lograr los objetivos ni tampoco conservar un amor o cuidar a la familia.
La mayoría de personas solo considera que existe la pasión que se le dedica a la pareja, pero existen otros tipos, igual de profundos para sentirse apasionado.
La pasión, por común acuerdo, nos mantiene activos en algunos ámbitos: Amor, deseo, gozo, odio, aversión y tristeza. Estos ámbitos incluyen todo en nuestra vida: las metas, el arte, la creatividad, el trabajo e incluso la muerte.
Es obvio que todos tenemos distintos receptores de nuestra pasión, pero la duda surge cuando nosotros decimos que ya no tenemos la pasión para continuar. ¿Cómo recuperar la pasión perdida? Buena pregunta.
La pasión perdida es la enfermedad que supera en infectados al estrés. Si perdemos la pasión en lo que hacemos, sea cual fuera la acción que realizamos, perdemos el sentido y el gusto por dicha actividad. Muchos expertos indican que una vez perdida la pasión, se debe ubicar otra fuente más poderosa.
Si se quiere comparar la pasión con alguna reacción biológica, sería conveniente asemejarla con la adrenalina. La adrenalina nos permite movernos para luchar o huir al temer. Pero a diferencia de la pasión, una de las reacciones incontrolables de la adrenalina es la parálisis completa.
Entonces, si la pasión es una emoción, ¿cómo volver a sentirla? No se puede duplicar las condiciones que crearon una emoción. La pasión, al igual que la mayoría de los sentimientos que duran, es fruto de una decisión constante de no perderla. No hay manuales al respecto (ni siquiera en los poemas más románticos o eróticos).
En los casos en los que se pierde la pasión, debemos ubicar esa “electricidad”, a falta de una mejor palabra, para recargar nuestra motivación. De eso depende nuestro éxito y confort.
Sabiendo eso, queda preguntarnos ¿por qué perdemos la pasión, si se trata, de una decisión? La respuesta más rápida sería echarle la culpa a la rutina. Pero considero que eso es una excusa, pues la vida está llena de rutinas que se repiten más de una vez. El punto es saber cómo hacer interesante la rutina. Lograr ese cometido es de lo que realmente trata la pasión.
BYE
MUERTE (POEMA)
Luna Ph me pediste una palabra que uso a menudo, por lo que es más retadora. Escrita el 29.05.2014
MUERTE
Cayó el telón
pero la función debe continuar.
Elegante señora,
lleva un vestido blanco y un antifaz negro,
el vestido fue suyo siempre, pero robó el antifaz junto con la hoz.
La muerte intentó pelear contra ella hace muchos años
en aquel lugar donde los ángeles descansaban.
Ella fue corrompida por todos los colores del arco iris y no se dejó derrotar.
Al asesinar al portador anterior,
ella heredó sus deberes y desde entonces recorre el mundo entero.
El libreto no muestra cómo actuar.
Lágrimas se derramarán
y algunas risas sonarán cuando las memorias dulces lleguen.
Ella es implacable.
No tiene piedad. Su responsabilidad va primero.
No te puedes ocultar de dos seres: el amor y la muerte.
Ella, en su inmenso poder, es menos fuerte que su rival: Amor
Ella se podrá llevar a todos, pero el amor puede sanar
Ella se siente sola.
Perdió mucho en el camino.
Así deberá ser hasta que alguien tome su lugar.
Ella intentará pelear con alguien que la vencerá.
Es en ese momento que la muerte morirá para ya no resucitar…
Hermosa dama, baja tu hoz y limpia el mundo,
sin tu presencia, no tendría sentido la Vida.
MUERTE
Cayó el telón
pero la función debe continuar.
Elegante señora,
lleva un vestido blanco y un antifaz negro,
el vestido fue suyo siempre, pero robó el antifaz junto con la hoz.
La muerte intentó pelear contra ella hace muchos años
en aquel lugar donde los ángeles descansaban.
Ella fue corrompida por todos los colores del arco iris y no se dejó derrotar.
Al asesinar al portador anterior,
ella heredó sus deberes y desde entonces recorre el mundo entero.
El libreto no muestra cómo actuar.
Lágrimas se derramarán
y algunas risas sonarán cuando las memorias dulces lleguen.
Ella es implacable.
No tiene piedad. Su responsabilidad va primero.
No te puedes ocultar de dos seres: el amor y la muerte.
Ella, en su inmenso poder, es menos fuerte que su rival: Amor
Ella se podrá llevar a todos, pero el amor puede sanar
Ella se siente sola.
Perdió mucho en el camino.
Así deberá ser hasta que alguien tome su lugar.
Ella intentará pelear con alguien que la vencerá.
Es en ese momento que la muerte morirá para ya no resucitar…
Hermosa dama, baja tu hoz y limpia el mundo,
sin tu presencia, no tendría sentido la Vida.
BYE
La imagen la dibujó mi buena amiga Psiquechan para mi primer poemario.
FELICIDAD
Nicolle Aliaga, usé tu palabra para redactar algunas líneas. Espero sean de tu agrado....Escrito el 29 de mayo de 2014
FELICIDAD
De un lado a otro la buscaremos,
desde la aurora boreal
hasta lo más austral de la Patagonia.
Iremos de Este a Oeste, siguiendo el rastro del Sol.
Espinas negras cuidan el camino…
no veremos lo que a lo lejos se esconde.
¿Será nuestra felicidad? O acaso ¿será un espejismo tentador?
Nuestra brújula no deja de girar.
¿En dónde buscar?
Cada vez que pensamos estar cerca, algo nos aleja del destino.
Parece que jugamos a las escondidas
¿Quién ha visto la felicidad?
Una niña me dijo que ella la encontró en su jardín, no sin antes buscarla por todo el mundo.
Cuando fuimos a investigar, ya no estaba ahí.
Estamos listos para continuar…
no tenemos pistas que seguir…
pero sabemos que en algún lugar estará.
La brújula sigue apuntando a nuestros pechos
¿Estará averiada?
Dicen los rumores que la felicidad está al otro lado del arco iris.
¡Vayamos a ver!
Ya no tenemos nada que perder.
Es un Camino largo que recién empezamos…
FELICIDAD
De un lado a otro la buscaremos,
desde la aurora boreal
hasta lo más austral de la Patagonia.
Iremos de Este a Oeste, siguiendo el rastro del Sol.
Espinas negras cuidan el camino…
no veremos lo que a lo lejos se esconde.
¿Será nuestra felicidad? O acaso ¿será un espejismo tentador?
Nuestra brújula no deja de girar.
¿En dónde buscar?
Cada vez que pensamos estar cerca, algo nos aleja del destino.
Parece que jugamos a las escondidas
¿Quién ha visto la felicidad?
Una niña me dijo que ella la encontró en su jardín, no sin antes buscarla por todo el mundo.
Cuando fuimos a investigar, ya no estaba ahí.
Estamos listos para continuar…
no tenemos pistas que seguir…
pero sabemos que en algún lugar estará.
La brújula sigue apuntando a nuestros pechos
¿Estará averiada?
Dicen los rumores que la felicidad está al otro lado del arco iris.
¡Vayamos a ver!
Ya no tenemos nada que perder.
Es un Camino largo que recién empezamos…
OLVIDO
Charo Pérez Schelotto, una palabra peligrosa, sin duda... Te doy olvido. Tómalo con cautela. Escrito el 29 de mayo de 2014.
OLVIDO
Olvido sanador
que lastima para curar.
Memorias borradas por agentes externos
y sentimientos propios.
Agridulce sensación…
muchos la necesitan para seguir,
otros dicen que prefieren recordar todo, incluso lo doloroso,
alegan que eso es parte de su identidad.
Otros tantos no tienen elección…
olvidan cómo vivir, cómo crecer e incluso cómo sentir…
Existen aquellos que fingen olvidar,
y así convivir con sus consciencias falsamente tranquilizadas.
Hombres y mujeres que buscan olvidar,
sin éxito en su búsqueda frustrada.
Olvido, espada de dos filos.
Ten cuidado con él…
no vaya a ser que olvides el por qué quieres olvidar…
OLVIDO
Olvido sanador
que lastima para curar.
Memorias borradas por agentes externos
y sentimientos propios.
Agridulce sensación…
muchos la necesitan para seguir,
otros dicen que prefieren recordar todo, incluso lo doloroso,
alegan que eso es parte de su identidad.
Otros tantos no tienen elección…
olvidan cómo vivir, cómo crecer e incluso cómo sentir…
Existen aquellos que fingen olvidar,
y así convivir con sus consciencias falsamente tranquilizadas.
Hombres y mujeres que buscan olvidar,
sin éxito en su búsqueda frustrada.
Olvido, espada de dos filos.
Ten cuidado con él…
no vaya a ser que olvides el por qué quieres olvidar…
MUTANTE
Melissa Gold Pérez nuestra palabra dio fruto. No olvido cuando conversamos en tu sala hace años al respecto. Escrito el 29 de mayo de 2014
MUTANTE
Corazones evolucionados más allá del entendimiento humano:
Almas mutantes al nacer.
Humanos con la capacidad de conectarse sin estar presentes.
Empatía que nos une,
sueños que nos comunican,
telepatía del espíritu valiente.
Sensibilidad que une la creatividad con la habilidad de vernos el uno al otro.
Sangre que recorre mis venas y tus arterias,
un solo ser.
Mutantes somos,
evolucionados sin que nadie lo note en un mundo
con miedo.
Palos y piedras, nuestros huesos pueden romper,
pero nuestra esencia es inquebrantable…
Mensajes de nuestros antepasados,
algunos en sueños y otros en el mundo real.
Sentimos la mutación en nuestro actuar.
Amor y comprensión,
para los corazones mutantes
con sangre púrpura en su interior.
Escudo mental que se levanta para evitar que el dolor nos dañe
y la habilidad de una esponja para absorber las enseñanzas de la vida.
Mutaciones que nacieron
de la unión del hijo de la tierra y la diosa de las letras
para llegar al siguiente nivel: FELICIDAD PROPIA.
MUTANTE
Corazones evolucionados más allá del entendimiento humano:
Almas mutantes al nacer.
Humanos con la capacidad de conectarse sin estar presentes.
Empatía que nos une,
sueños que nos comunican,
telepatía del espíritu valiente.
Sensibilidad que une la creatividad con la habilidad de vernos el uno al otro.
Sangre que recorre mis venas y tus arterias,
un solo ser.
Mutantes somos,
evolucionados sin que nadie lo note en un mundo
con miedo.
Palos y piedras, nuestros huesos pueden romper,
pero nuestra esencia es inquebrantable…
Mensajes de nuestros antepasados,
algunos en sueños y otros en el mundo real.
Sentimos la mutación en nuestro actuar.
Amor y comprensión,
para los corazones mutantes
con sangre púrpura en su interior.
Escudo mental que se levanta para evitar que el dolor nos dañe
y la habilidad de una esponja para absorber las enseñanzas de la vida.
Mutaciones que nacieron
de la unión del hijo de la tierra y la diosa de las letras
para llegar al siguiente nivel: FELICIDAD PROPIA.
BYE
DISCLAIMER: LA IMAGEN QUE UTILIZO PARA GRAFICAR NO ME PERTENCE. LA ENCONTRÉ EN http://www.comicvine.com/images/1300-1740420
ALIENÍGENA
Irene Villalaz, agradezco tu palabra: ALIENÍGENA. Me hizo recordar referencias en la ficción que me vieron crecer. Escrito el 28 de mayo de 2014
ALIENÍGENAS
¡Nos invaden!
Alienígenas de todo tipo están visitándonos desde siempre…
¡Cuiden sus gatos! Algunos peludos y pequeños buscarán comerlos.
Otros gastarán su línea de larga distancia llamando a casa.
¡Nos invaden!
Amigos extraños que tienen escamas bajo la piel y comen roedores para conservar la línea;
Hay un imperio allá afuera, cuyo centro es la Estrella de la Muerte ¿lo visitamos?
Podremos si usamos el lado oscuro de la fuerza.
La policía interestelar, que se viste de negro, no podrá hacer nada.
Los Alienígenas quieren visitarnos y ser nuestros parientes favoritos.
Conocí uno que quiere destruir la Tierra porque no le deja ver Venus…
¡OVNIS!
Se comentan los encuentros cercanos del tercer tipo en las más antiguas culturas:
Ciudades de piedra, pirámides perfectas, rostros gigantes o señales en el maíz.
¡Nos invaden! Quieren ser amigos y hablar con nuestro líder.
¡Ladrones de ganado!
Quieren abrir restaurantes de parrillas en Andrómeda.
Darán ofertas en el día de nuestra independencia.
Todo está fuera de nuestro mundo.
¡Se reproducen con nosotros!
Nacerá del vientre masculino un ser con dos bocas y cabeza grande.
¡Nos invaden!
Quieren conocernos a fondo.
¡Doctor, opere por favor!
Llévenos al planeta X,
a lo mejor podemos colonizarlo juntos.
Aprendamos uno del otro.
Venimos en Paz…
BYE
Disclaimer: La imagen no me pertenece. La encontré en http://culturepopped.blogspot.com/2010_06_01_archive.html
La utilizo para graficar.
ALIENÍGENAS
¡Nos invaden!
Alienígenas de todo tipo están visitándonos desde siempre…
¡Cuiden sus gatos! Algunos peludos y pequeños buscarán comerlos.
Otros gastarán su línea de larga distancia llamando a casa.
¡Nos invaden!
Amigos extraños que tienen escamas bajo la piel y comen roedores para conservar la línea;
Hay un imperio allá afuera, cuyo centro es la Estrella de la Muerte ¿lo visitamos?
Podremos si usamos el lado oscuro de la fuerza.
La policía interestelar, que se viste de negro, no podrá hacer nada.
Los Alienígenas quieren visitarnos y ser nuestros parientes favoritos.
Conocí uno que quiere destruir la Tierra porque no le deja ver Venus…
¡OVNIS!
Se comentan los encuentros cercanos del tercer tipo en las más antiguas culturas:
Ciudades de piedra, pirámides perfectas, rostros gigantes o señales en el maíz.
¡Nos invaden! Quieren ser amigos y hablar con nuestro líder.
¡Ladrones de ganado!
Quieren abrir restaurantes de parrillas en Andrómeda.
Darán ofertas en el día de nuestra independencia.
Todo está fuera de nuestro mundo.
¡Se reproducen con nosotros!
Nacerá del vientre masculino un ser con dos bocas y cabeza grande.
¡Nos invaden!
Quieren conocernos a fondo.
¡Doctor, opere por favor!
Llévenos al planeta X,
a lo mejor podemos colonizarlo juntos.
Aprendamos uno del otro.
Venimos en Paz…
BYE
Disclaimer: La imagen no me pertenece. La encontré en http://culturepopped.blogspot.com/2010_06_01_archive.html
La utilizo para graficar.
MADRE
Humberto Zegarra Solano
el 10.05.14 me pediste un escrito con una de las palabras más
utilizadas. un reto escribir algo que no hayan escrito antes. Espero te
agrade lo que salió. compartelo con Vanessa Benavides. Escrito el 28 de mayo de 2014.
MADRE
Y ella se convirtió en madre.
Dejó de lado los sueños de una niña, para asumir los de una mujer.
Con canciones de cuna y cuentos antes de dormir,
reafirma su título de madre y confirma la paternidad de él.
Las cosas no salieron como él las planeó.
Salieron como Dios las quiso:
Padre y madre de una bebé.
Un plan mejor.
La creatividad de ella y su masculina seriedad…¿qué saldrá de esa mezcla?
madre es de una estrella que ilumina el firmamento
él teme por el tiempo que vendrá, pero atesora el tiempo que ha pasado.
Mientras el neófito padre consigue su licencia para utilizar armas de fuego,
con la tenue esperanza de alejar a los lobos de su ovejita
ella guía su mano en este camino con experiencia superior a sus años
Él se quedó dormido con la historia que ella le contó a su hija.
¿será que ese es el poder que ganan las madres?
Entre amanecidas y caricias
se enseñan a ser padres
ella le dio una lección importante;
le otorgó el título más pesado y hermoso: es un padre practicante.
Ella es la guardiana de su tesoro
Él espera estar a la altura y ser su apoyo.
BYE
MADRE
Y ella se convirtió en madre.
Dejó de lado los sueños de una niña, para asumir los de una mujer.
Con canciones de cuna y cuentos antes de dormir,
reafirma su título de madre y confirma la paternidad de él.
Las cosas no salieron como él las planeó.
Salieron como Dios las quiso:
Padre y madre de una bebé.
Un plan mejor.
La creatividad de ella y su masculina seriedad…¿qué saldrá de esa mezcla?
madre es de una estrella que ilumina el firmamento
él teme por el tiempo que vendrá, pero atesora el tiempo que ha pasado.
Mientras el neófito padre consigue su licencia para utilizar armas de fuego,
con la tenue esperanza de alejar a los lobos de su ovejita
ella guía su mano en este camino con experiencia superior a sus años
Él se quedó dormido con la historia que ella le contó a su hija.
¿será que ese es el poder que ganan las madres?
Entre amanecidas y caricias
se enseñan a ser padres
ella le dio una lección importante;
le otorgó el título más pesado y hermoso: es un padre practicante.
Ella es la guardiana de su tesoro
Él espera estar a la altura y ser su apoyo.
BYE
CRUDO
Jose Carrasco Benavides me pediste una palabra retadora. Crudo. Salió algo cortito y distinto. Espero te agrade muahahahaha. Escrito el 27 de mayo 2014.
CRUDO
-Mami, ya no quiero comer. ¡Mi carne parece estar cruda!
-¿Cruda? No digas tonterías, Sofía. Come todo. Estuve horas cocinándola. ¡Cruda! ¿Qué me crees?
-Pero mami pruébala. Está toda roja, mírala y la siento salada.
-Sofía, deja de ser majadera. Come que te hace bien. No te levantas de la mesa si no dejas el plato limpio. Cociné tu plato junto con el mío y está en su punto. Cámbiame esa cara y come de una vez, que tienes que hacer tu tarea.
-Pero mami, la tarea es para el lunes y hoy es jueves. ¿No puedo jugar un rato? y te prometo que hago mi tarea mañana.
-Sofía, no voy a discutir eso. Hoy la haces y punto. Y deja de distraerte, termina tu hígado que te hace bien.
Tanto madre como hija comieron en silencio. El plato de Sofía seguía a la mitad y ya había pasado media hora. Su madre la miraba con severidad. Sofía la miraba con una mezcla de rebeldía y sumisión. Definitivamente no le convenía fastidiar el humor de su madre.
-Mami, ya comí bastante, ¿puedo parar ya?
-Sofía, hay niños en el mundo que no tienen qué comer. No te pongas caprichosa, con lo difícil que es conseguir carne fresca en estas épocas. Anda, si comes todo te hago el postre que te gusta.
-¿En serio mami? ¿Me harías eso?
-Claro, los dedos bañados en dulce que tanto te gustan. Ahí tengo miel para ponerles. Y son dedos frescos. El mismo niño que “donó” su hígado para que comas, donó sus deditos.
-¡Qué bien mami! Pero mami, ¿la próxima vez me lo podrías freír más?
-Está bien Sofía, la próxima vez no te lo daré ¾. Con razón decías que estaba crudo.
-Te quiero mami. Eres la mejor. Mami, ¿tienes azúcar impalpable para los deditos? Sabes que me encantan así.
-Cualquier cosa por mi pequeña.
La televisión que había en la cocina mostraba un noticiero en el que mencionaban que aún no habían encontrado al niño de 6 años desaparecido en el centro comercial dos días antes. Sofía y su madre ignoraron al comentarista de la noticia mientras la niña terminaba su plato de hígado de niño y su madre cortaba los dedos para hacer el postre prometido.
BYE
DISCLAIMER: LA IMAGEN NO ME PERTENECE. LA ENCONTRÉ EN http://blog.radiantlifecatalog.com/bid/63690/5-Ways-to-Get-More-Choline-in-Your-Diet-Secret-of-Radiant-Living Y LA UTILIZO SOLO PARA GRAFICAR LA ESCRITURA.
CRUDO
-Mami, ya no quiero comer. ¡Mi carne parece estar cruda!
-¿Cruda? No digas tonterías, Sofía. Come todo. Estuve horas cocinándola. ¡Cruda! ¿Qué me crees?
-Pero mami pruébala. Está toda roja, mírala y la siento salada.
-Sofía, deja de ser majadera. Come que te hace bien. No te levantas de la mesa si no dejas el plato limpio. Cociné tu plato junto con el mío y está en su punto. Cámbiame esa cara y come de una vez, que tienes que hacer tu tarea.
-Pero mami, la tarea es para el lunes y hoy es jueves. ¿No puedo jugar un rato? y te prometo que hago mi tarea mañana.
-Sofía, no voy a discutir eso. Hoy la haces y punto. Y deja de distraerte, termina tu hígado que te hace bien.
Tanto madre como hija comieron en silencio. El plato de Sofía seguía a la mitad y ya había pasado media hora. Su madre la miraba con severidad. Sofía la miraba con una mezcla de rebeldía y sumisión. Definitivamente no le convenía fastidiar el humor de su madre.
-Mami, ya comí bastante, ¿puedo parar ya?
-Sofía, hay niños en el mundo que no tienen qué comer. No te pongas caprichosa, con lo difícil que es conseguir carne fresca en estas épocas. Anda, si comes todo te hago el postre que te gusta.
-¿En serio mami? ¿Me harías eso?
-Claro, los dedos bañados en dulce que tanto te gustan. Ahí tengo miel para ponerles. Y son dedos frescos. El mismo niño que “donó” su hígado para que comas, donó sus deditos.
-¡Qué bien mami! Pero mami, ¿la próxima vez me lo podrías freír más?
Hígado |
-Está bien Sofía, la próxima vez no te lo daré ¾. Con razón decías que estaba crudo.
-Te quiero mami. Eres la mejor. Mami, ¿tienes azúcar impalpable para los deditos? Sabes que me encantan así.
-Cualquier cosa por mi pequeña.
La televisión que había en la cocina mostraba un noticiero en el que mencionaban que aún no habían encontrado al niño de 6 años desaparecido en el centro comercial dos días antes. Sofía y su madre ignoraron al comentarista de la noticia mientras la niña terminaba su plato de hígado de niño y su madre cortaba los dedos para hacer el postre prometido.
BYE
DISCLAIMER: LA IMAGEN NO ME PERTENECE. LA ENCONTRÉ EN http://blog.radiantlifecatalog.com/bid/63690/5-Ways-to-Get-More-Choline-in-Your-Diet-Secret-of-Radiant-Living Y LA UTILIZO SOLO PARA GRAFICAR LA ESCRITURA.
domingo, 29 de junio de 2014
FE
Tonny Gutierrez, respondo a tu reto del 10.05.2014 con un poema. Tu palabra: Fe. Al escribir se me salé el catequista que hay en mí. Escrito el 26 de mayo de 2014
FE
Sin ver puedo mover montañas y caminar sobre las aguas.
Con mi fe puedo decirle a los enfermos que sanen, pero todo depende de ellos,
si no creen, yo no puedo creer por ellos.
He perdido la fe en varias oportunidades.
Siempre la he encontrado regresando mis pasos
hasta el punto en el que perdí mi brújula.
Creo sin ver, veo sin entender,
entiendo en mi razón limitada
y muchas veces pido ver las heridas para comprobar.
Busco racionalidad a las enseñanzas de mis antepasados,
meteré mis dedos en las llagas causadas por los clavos y la lanza;
¿tendré lo necesario para abandonarme?
¿Confío?
¿Por qué mi fe es trémula?
¿De dónde vienen mi fuerza y mi decisión?
Tengo la fe de un grano de mostaza
así como la fe de un humano,
pero tengo las dudas de alguien que no recuerda quién es.
Avivar el fuego de la vela verde
solo podré si cuestiono
“¿en quién tengo fe?”
Quisiera la fe de un niño,
que nace del amor
pero tengo la compresión del tamaño de un dedal.
Una vez leí:
“Donde hay fe, hay amor.
Donde hay amor, está Dios
Donde está Dios, no falta nada.”
A ejercitar mi fe
orando en silencio
creyendo en tus promesas.
Y yo me sigo preguntando:
“¿en quién tengo fe?”
FE
Sin ver puedo mover montañas y caminar sobre las aguas.
Con mi fe puedo decirle a los enfermos que sanen, pero todo depende de ellos,
si no creen, yo no puedo creer por ellos.
He perdido la fe en varias oportunidades.
Siempre la he encontrado regresando mis pasos
hasta el punto en el que perdí mi brújula.
Creo sin ver, veo sin entender,
entiendo en mi razón limitada
y muchas veces pido ver las heridas para comprobar.
Busco racionalidad a las enseñanzas de mis antepasados,
meteré mis dedos en las llagas causadas por los clavos y la lanza;
¿tendré lo necesario para abandonarme?
¿Confío?
¿Por qué mi fe es trémula?
¿De dónde vienen mi fuerza y mi decisión?
Tengo la fe de un grano de mostaza
así como la fe de un humano,
pero tengo las dudas de alguien que no recuerda quién es.
Avivar el fuego de la vela verde
solo podré si cuestiono
“¿en quién tengo fe?”
Quisiera la fe de un niño,
que nace del amor
pero tengo la compresión del tamaño de un dedal.
Una vez leí:
“Donde hay fe, hay amor.
Donde hay amor, está Dios
Donde está Dios, no falta nada.”
A ejercitar mi fe
orando en silencio
creyendo en tus promesas.
Y yo me sigo preguntando:
“¿en quién tengo fe?”
La imagen la obtuve de http://kwanzaaguide.com/2010/12/imanifaith-seventh-of-kwanzaa/ a modo de ilustración. No intento infringir derechos de autor.
sábado, 7 de junio de 2014
PERMITAMOS
Permitamos que el
viento nos transporte a un
lugar mejor…
Toleremos que el amor nos proteja
del mal…
Dejemos que el fuego que nace de
nuestro interior nos sirva de arma…
Podemos ser como tres diferentes
flechas muy distintas entre sí,
ser fríos como una flecha
congelada,
vivos como el fuego en una
flecha en llamas,
o iluminar la vida de los demás
como una flecha de luz dorada.
Infinidad de máscaras cubren
nuestras faces,
pero no nos permitimos ser como el cristal más fino, transparente…
Usemos la espada de Dios para
destruir la corrupción…
utilicemos el martillo de la
justicia, aunque debamos levantarlo con dos manos.
Sintamos la música en el fondo de
nuestras almas.
Felicidad, nuestra misión
primordial
Bombardeemos el mundo con
emotividad antes que pasen siete años.
Caminemos en el vacío,
respiremos bajo el agua
y soportemos las penas.
Dejemos que el poder, el valor y
la sabiduría que llevamos dentro,
se unan guiarnos
AMAR
Uno
de los primeros verbos que aprendemos a conjugar, pero el penúltimo que
realmente empezamos a usar (el último solo es morir). ¿Qué significa realmente
amar? Muchos escritores, desde el tiempo de la mitología, pasando por los
autores bíblicos hasta poetas contemporáneos han intentado definirlo. Algunos
dicen que es el poder por excelencia, capaz de vencer todos los maleficios o
incluso vencer a la propia muerte.
¿Cómo
una acción tan fundamental para la vida es tan difícil de aprender? ¿Acaso amar
es solo un verbo más? Una acción tan peligrosa que motiva la entrega a otro
ser. Los padres aman a sus hijos, los hijos aman a sus padres, los esposos se
aman, los amigos se aman unos a otros, pero ¿qué ocurre cuando en lugar de amar
decidimos jugar?
Tantas
definiciones tan buenas en la teoría, pero en la práctica no hay instrucciones
para realizar la “tarea” a manera cabal. No hay expertos en el amor. Ni Afrodita
ni Cupido existieron. La Biblia nos dice que amar es ser paciente, que el amor
perdona todo, que no hay amor más grande que dar la vida por los amigos, entre
otras interpretaciones. Los poetas modernos y antiguos lo definen en su faceta
romántica o erótica. Algunos de ellos se arriesgan a hablar de su antítesis: el
desamor.
A
pesar de todas las historias, todos los poemas, todos los versículos y todas
las obras de arte que abundan en la cultura humana, aún no encontramos la
conjugación perfecta:
·
Yo
amo.
·
Tú
amas.
·
Ella/Él
ama.
·
Nosotros
amamos.
·
Ustedes
aman.
·
Ellos
aman.
Todos
los pretéritos, los presentes los futuros y condicionales del verbo AMAR se ven
perfectos en los libros y pergaminos, pero al momento de evaluarnos, muchos
hemos fallado (a veces hemos aprobado con las justas).
Todos
los sabios han estado cerca de comprender el amor, e incluso han llegado a amar
realmente. Sus investigaciones y experiencias se resumen en protección de otro
ser, buscando todo el bienestar que se pueda obtener para el prójimo. Se define
también como verbo transitivo que nos motiva a llevar a cabo otros verbos, los
cuales no haríamos en situaciones comunes. El amor también es definido como el
virus más contagioso, bello y “utópico”, pero más terrible que la muerte misma.
Cuando
uno de nosotros aprende a “conjugar el verbo” en la práctica, se siente miedo y
tranquilidad a la vez, por más que suene paradójico. Se dice que todos tenemos
el potencial de amar sin medida y que la medida de la vida de un hombre se
define en las estaciones de amor a lo largo de la vida. Sin embargo, no hay
acción que sea más difícil iniciar.
Frases
como “amar en verdad es como bailar descalzo en un rosal. Te lastimarás pero de
seguro valdrá la pena” o “quien no recuerde una locura de amor es que nunca amó
en verdad” son frases cargadas de fuerza latente, la cual no se activará hasta que
entendamos todas las implicancias. Amar no solo es una sensación espiritual o
una reacción química en nuestras glándulas. Amar suena inalcanzable, pero eso
es lo que lo hace tan perfecto: porque lo que vale la pena es lo que cuesta en
verdad.
Aunque
nosotros los humanos seremos incapaces de definir al 100 % el amar, somos
capaces de, en nuestra imperfección, ver chispazos de genialidad que nos
permitirán promover la acción alejando el miedo y el dolor inicial. Es cierto,
dolerá y tal vez “amar” nos obligue a llorar más de una vez, pero está en
nuestro instinto o escrito en nuestros genes el conjugar de manera
objetivamente un verbo tan subjetivo.
+++ARTÍCULO ESCRITO EL 25.05.14 COMO RESPUESTA AL RETO DE ROXANA BAZAN DE ESCRIBIR ALGO BASADO EN LA PALABRA AMAR
ESPERANZA
Todos dormían en la casa. No se escuchaba
sonido alguno, con excepción de las rítmicas respiraciones tranquilas que los
miembros de ese hogar emitían. Era una noche calurosa de marzo por lo que las
frazadas estaban de más en la cama que Ross compartía con su esposo. A pesar de
la paz que el rostro de Ross mostraba, una lágrima se escapaba sutilmente por
debajo de su cerrado párpado izquierdo.
-“Ross…Ross…tranquila. Todo saldrá bien”.-la
voz de Ana era como la recordaba Ross. Alegre y tranquila.
-“Ana, ya no puedo más. ¡He perdido todas las
fuerzas!”-Ross respondió levantando la
voz.
El sueño ya se había hecho recurrente. Siempre
era la misma escena. Ana y Ross estaban sentadas en la sala de un departamento
pequeño. Por las ventanas se veían torres de edificios familiares. Ambas
mujeres llevaban vestidos: Ross usaba uno color tierra y Ana uno celeste. Los
sillones cómodos y de color arena. Aunque no se movían nunca de la sala, Ross
sabía que el departamento tenía cuatro cuartos y estaba en el tercer piso del
edificio.
-“Ross, no has perdido las fuerzas. Solo
perdiste de vista el sol.”- La sonrisa de Ana brillaba como las estrellas.
-“Te prometí algo y no lo pude cumplir…”-Ross
comenzó a replicar, pero Ana levantó su mano, en una clara solicitud para que
su hermana menor guardará silencio.
-“No seas tan dura contigo misma. Has hecho más
de lo que ofreciste. Cuidaste a todos en la familia, mi pequeña hermanita.
Cuidaste a mis hijos: mi hermosa abeja[i],
mi adorada antorcha de luz[ii]
y mi pequeño mensaje de la Presencia de Dios[iii].
Me cuidaste a mí cuando mi querido Manolo se me adelantó. No puedes darte el
lujo de perder lo que me regalaste en vida: la Esperanza.”- Ana habló como toda
una maestra: con humildad y cariño.
Ross no tenía palabras para responder. Fuera
del departamento se escuchaba un perro ladrar en la lejanía de la calle. Ana
aprovechó el silencio para continuar.
-“Siempre cuidaste de todos nosotros. De
nuestra madre…de todos los hermanos…y tal vez nosotros no te dimos el crédito
que merecías. Fuiste el sol que ilumina nuestros caminos, la luz de la Esperanza
que se vuelve saeta contra el miedo. Yo te ayudaré a recordar.”
-“Ana, es que ya no puedo. Siento que no puedo
continuar. Todo se hace más difícil. Yo creo que todo se me va de las manos. La
memoria de nuestra madre…los problemas que nos alejaron. ¡Eras tú quien nos
mantenía unidos, no yo!”-Ross sollozó. En los cuartos del departamento se
escuchaban voces de niños, aunque Ross no los podía ver.
-“Ross, yo era la alegría. Y si la unión es lo
que falta, pues muéstrales que a pesar de todo, somos uno.”-Ana siguió firme en
su discurso.-“Mira todo lo que ha pasado gracias a ti. Muchos de nuestros
sobrinos terminaron sus carreras. Algunos pudieron sobrevivir a las vacas más
flacas. Ayudaste a Mamá en la ausencia de Papá. Entiéndelo de una buena vez.
Eres la Esperanza para nosotros. Solo debes encontrar en tu fe esa chispa para
que tú no desesperes. Te lo pido, hermanita. Dios me envió a ti para recordarte
esto.”- La sonrisa de Ana era más grande aún.
Ross no lo había notado antes, pero su hermana
llevaba a modo de aretes un par de esferas de navidad y una vincha con orejas
de ratona. No pudo evitar sonreír. Era una sonrisa cargada de buen humor que no
esbozaba hace bastantes meses. Se sintió nuevamente la de antes. La luz que se
filtraba por la ventana hacia que el cuerpo de Ana se viera transparente.
-“Anita, no te vayas. Por favor, necesito de tu
ayuda.”-Ross imploró al notar que ya era hora de la despedida.
-“Ross, siempre estoy contigo. Recuerda, haz
que la Esperanza no se apague nunca.”- Ana tocó el corazón de Ross con su dedo
índice.
Ross cerró los ojos. Antes que el sueño
terminará, sintió un calor intenso en su pecho. Un extraño símbolo apareció al
medio de él, justo donde el dedo de Ana se había posicionado antes de
desaparecer. El símbolo representaba un sol con un solo rayo de luz que
iluminaba fuertemente.
-“Gracias, Anita. Te extraño, pero te prometo
que no me rendiré. Lo haré por ti”.-Ross dijo, mientras abría sus ojos y una
lágrima caía por su mejilla izquierda. El sueño aún no había acabado, pero a lo
lejos se oía una alarma mientras el departamento desaparecía en una nube
blanca.
***
Eran las 5 de la mañana. Ross tenía que
levantarse para prepararse para salir, pero no podía quitarse la escena de la
cabeza. Su hermana querida le había traído un mensaje divino que ella no debía
ignorar. Era momento de secarse las lágrimas. Era momento de empezar de nuevo,
con las pilas recargadas de aquella virtud que ella no quería reconocer en sí
misma: la Esperanza de la vida nueva.
-“Ana, hoy es el primer día del resto de mi
vida. Gracias.”
Etiquetas:
ANA PEREZ DE GOLD; ROSSANNA PEREZ; ESPERANZA
CONFIANZA
Avanzas por la cuerda floja sin red de
protección debajo,
Ganaste y perdiste las ganas de caer al vacío.
Ganaste el privilegio de guardar el secreto más
grande,
Ese privilegio vino con un costo: tú también
debes confiar.
Tomemos estos riesgos juntos, tú en la cuerda
floja, yo en el trapecio.
¿Me sujetarás si me lanzo hacia ti? Yo te
sujetaré si no temes.
Cuéntame tus secretos más oscuros.
Yo te contaré mis verdades ocultas.
Camina más lento… no te apresures.
Mira mis ojos y concéntrate.
Abre las ventanas a tu alma. Yo no te dejaré
caer.
No mires abajo…solo confía y déjate llevar.
Somos los actores de este espectáculo privado.
Solo necesitas confiar.
Yo también tengo miedo, pero confío en ti.
++++ESCRITO EL 17.05.14 POR SOLICITUD DE Mijail León González
PACIENCIA
Lili estaba harta. Había practicado yoga; había
aprendido técnicas de respiración; escuchaba música instrumental; Nada le
resultó. Solo le faltaba intentar algo no tan ortodoxo. Había escuchado de una
bruja en el centro de la ciudad quien le podría ayudar. Según los rumores, era
experta en pociones.
Lili llegó al local de la bruja (que se hacía
llamar Mûre Du Petite).
El establecimiento estaba iluminado tenuemente con luces rojas. En los estantes
de las paredes se encontraban frascos que contenían líquidos de distintos
colores. Mûre Du Petite la
había citado a las 3:00pm. Faltaban unos minutos y Lili aprovechó para intentar
calmar los nervios. En el cuarto continuo se escuchaba como la hechicera
trabajaba con mucha energía. Habían hablado por teléfono y Lili le había
confesado que necesitaba una poción para obtener la paciencia.
-“Bienvenida
Lili. Terminé tu poción. Llegaste temprano.”- la voz de Mûre Du Petite era tan suave
que pareció un susurro. No obstante, habló tan de improviso que causó que Lili
se sobresaltara al ser interrumpida en sus pensamientos. No había notado que la
fabricante de pociones estaba de pie en frente de ella. Sostenía un frasco
pequeño que contenía un líquido morado que parecía ser un tanto viscoso
-“Ho…hola.
Hablamos por teléfono hace unos días…me dijiste que viniera hoy a recoger mi
pedido.”- Lili saludó, reponiéndose de la sorpresa inicial.
-“MMM ya veo
por qué me pediste esta mezcla. Ven conversemos un rato.”- Mûre Du Petite comentó. En
su voz una mezcla de sarcasmo y diversión se escuchaba y sus labios esbozaban
una sonrisa extraña, como si fuera una broma privada.
Las dos mujeres se sentaron en un pequeño sofá
blanco, a un lado de la tienda de pociones. Lili, le contó que su falta de
paciencia había aparecido cuando fue una adolescente. No podía esperar por nada
y todo le causaba molestia: una negativa de sus padres, una broma inocente o
cuando algo no salía de acuerdo al plan.
No fue interrumpida en ningún momento
durante los 30 minutos que estuvo hablando, y aunque la mirada intensa de Mûre Du Petite no se alejaba
de la de Lili, la bruja no dejó de acariciar el frasco con el líquido morado.
Cuando Lili terminó de describir su problema, la
hechicera se puso de pie y caminó hacia la puerta del cuarto en donde estuvo
trabajando, sin soltar la pequeña botella. Sus ojos oscuros se llenaron de una
seriedad.
-“Lili, antes que llegaras elaboré la poción
que me pediste. Es una poción bastante complicada, no solo por el procedimiento
de fabricación, sino por los ingredientes y dónde conseguirlos. Contiene 7
semillas de camomila, 4 tréboles de cuatro hojas, 22 lágrimas de adolescentes,
dos colmillos pulverizados de serpiente, 8 espinas de rosas rojas, 5 pétalos de
orquídea negra y 2 onzas de agua de azahar. Escúchame bien. Es una poción
peligrosa, pues una toma y te devolverá esa tolerancia perdida, pero también
atraerá toda serie de situaciones para poder pulir esa paciencia. ¿Estás segura
de querer beberla?”.- Advirtió Mûre Du Petite.
-“No estoy
segura de entender todo lo que me dices, pero la necesito. Mi falta de
paciencia está haciendo peligrar mi trabajo y
mi relación con mi familia. Si me dices que me devolverá la paciencia,
estoy dispuesta a hacer cualquier cosa. Tomaré el riesgo.”- Lili respondió.
La dueña del
local asintió pesadamente y le entregó la poción de paciencia a Lili, quien luego
de un minúsculo minuto de duda, secó el contenido del frasco.
******
Pasaron 9 meses desde la reunión entre Lili y Mûre Du Petite. Lili había
notado una gran mejoría. Ya no se molestaba con su familia y sus relaciones interpersonales
habían dejado de colgar de un hilo. Sin embargo, la advertencia de la bruja
seguía rondando en su cabeza: “…pero también atraerá toda serie de situaciones para poder pulir esa
paciencia”.
El tercer día de aquel noveno mes empezó en
forma extraña. El celular no sonó para despertarla a tiempo. Se le hizo tarde
para un desayuno de trabajo. En el auto fue atrapada en el tráfico camino a su
oficina. Sus subordinados habían arruinado accidentalmente una presentación de presupuesto.
Al medio día su mejor blusa blanca se manchó con el almuerzo. Por la tarde, su
computadora no arrancaba y al finalizar el día su jefe le dijo que al día
siguiente debía llegar más temprano y hacer horas extras. Lili se sentía
terrible. Por dentro quería llorar y gritar, pero lo único que su cuerpo hacía
era reducir la velocidad en su respiración, así como la frecuencia de sus
latidos cardíacos. Una tremenda jaqueca empezó y aunque su ser no le permitía
reaccionar, sentía que su estómago se le revolvía con la cólera contenida.
Al llegar a su casa, vio que la puerta estaba
abierta. Asustada, entró sin demora y encontró sentada en su sala a Mûre Du Petite.
Sin esperar a
que Lili hablara si quiera, Mûre Du Petite levantó la
mirada y con una sonrisa triste saludó a Lili repitiendo su advertencia: -“…pero también atraerá toda serie de
situaciones para poder pulir esa paciencia. En verdad, la paciencia falsa es
peligrosa…esa ira contenida en ti te está causando úlceras. Tú me pediste una
poción que imita la paciencia. Te dará la calma externa, aunque por dentro no
puedas controlar el dolor. La paciencia debe ganarse entrenándose, no con
atajos. Las situaciones que hoy viviste empeorarán, hasta que tú misma decidas
aceptar las cosas malas y buenas sin desear cambiarlas. Eso, querida, es la
paciencia verdadera.”
-“¿Cómo pudiste?”- Lili quería golpear a Mûre Du Petite, pero al
parecer la poción seguía regulando su respiración. Su jaquea empeoró.
-“Insisto,
debes aceptar una buena dosis de ira para tener paciencia. Si no lo haces, tu
cuerpo no lo soportará. Por Favor Lili, cierra los ojos y acepta que eres capaz
de tener paciencia por ti misma”.- Mûre Du Petite respondió.
Cerrando los
ojos, Lili concentró su mente en un recuerdo específico. La noche en la que perdió
la paciencia por primera vez y lastimó a su hermano menor. En medio de este
recuerdo, sintió el sabor agridulce de la poción. Éste se sintió fuerte al
principio.
El recuerdo se
convirtió en lo que debió haber sido: ella molesta, pero controlada diciéndole
a su hermano que no debió tocar sus cosas. Otra imagen
invadió su mente: Lili estaba de pie en la fila de un local. Al cabo de unos
minutos ella se retiró desesperada. El sabor de la poción se fue difuminando.
La escena se repitió, pero en esta ocasión, ella se quedó en la fila y al final
recibió la entrada al espectáculo que tanto quiso ver.
Mil
pensamientos comenzaron a girar en su mente, algunos mostraban la escena en la
que Lili perdía la paciencia y otros la mostraban con la reacción que debería
haber tenido.
Al cabo de un
rato, el sabor de la poción de paciencia desapareció por completo y Lili pudo
abrir los ojos. La calma falsa había pasado. Una paz verdadera la comenzó a
invadir. Mûre Du Petite la
miraba con rostro preocupado.
-“¿Qué fue
eso?”- Lili preguntó no con molestia, pero sí cargada de sorpresa.
-“Tenías que aprender sola. Yo fui como tú,
impaciente y colérica, hasta que un amigo mío en su lecho de muerte me dio la
responsabilidad de hacer brillar mi emblema de paciencia. No lo entendí al
principio, pero en su honor decidí entrenarme día y noche. De nada me sirvió la
poción. Sí, yo la tomé hace años, y al igual que tú, experimenté la calma
falsa. Me tomó un año entero comprender que me hacía daño. Una noche de febrero
en la que decidí no permitir que la ira me domine, mi pecho comenzó a brillar con
un símbolo muy parecido al de la paz. Soy una bruja, pero necesité aprender
como humana que la más grande magia es decidir algo. Yo decidí ser paciente.
Fue esa decisión la que me mantiene viva. Por favor, aprende de mis errores y
de los tuyos. Acabas de decidir ser paciente. Mira tu pecho”.- Mûre Du Petite explicó
señalando el torso de Lili. A la altura del corazón de Lili, el emblema de la
paciencia empezó a brillar, arrojando una luz morada. Por primera vez en muchos
años Lili sintió que no es mala idea esperar por algo mejor…
+++ ESCRITO EL 17 DE MAYO DE 2014
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