Un padre: cómplice de juegos de héroes y villanos.
Siempre instigando para que seamos mejores que él,
siempre la mano dura que oculta la ternura y la sonrisa.
Lleno de orgullo por nuestra existencia, y admitámoslo, cuántos hemos imaginado seguir sus pasos, aunque sea solo por 15 minutos o tal vez más.
Es el padre que, aunque no sepa muchas veces cómo mostrarlo, se preocupa por el bienestar de sus hijos.
Es aquel que aunque no lo admita, ha llorado al ver nacer.
Como dicen, la mamá cría y corrige, el padre nos enseña a divertirnos y también a ser responsables.
Estas cortas líneas son para todos los padres, y para todos nosotros los hijos, que aunque no seamos padres y tal vez no tengamos al papá al lado, comprendemos que ser padre, es un trabajo maravilloso lleno de amor. Sabemos que no es fácil, pero definitivamente vale la pena.
FELIZ DÍA DEL PADRE ADELANTADO
Vilo