martes, 3 de septiembre de 2024

Aquelarre

 


 

Soy Hécate, diosa guardiana de la hechicería. Los iluminaré con mis antorchas, jóvenes usuarios de mis dones.

 

No importa su origen, sexo o su predilección por la maldad o bondad, busquen formar parte de un aquelarre. Brujas y hechiceros recuerden que en soledad no tendrán poder verdadero.

 

Hijos e hijas míos, la magia es neutral. La moral de cada uno los guiará por el camino que elijan. Apóyense en su aquelarre.

 

No importa su experiencia con encantamientos, maldiciones o pociones, miren el fuego de mi antorcha y sigan su corazón. Así no se equivocarán.

 

Acepten mi invitación. Mi aquelarre las guiará, pero debo de advertirles: cuiden su corazón. Si derraman una lágrima por ruptura del mismo, perderán sus poderes que tantos les costó obtener. No interesa si la ruptura viene por amor romántico o filial.

 

No intenten imposibles. Una cosa es embotellar el gusto y la lujuria, pero el amor es una magia primordial y no puede ser creado.

 

Hijos e hijas míos, vengan a mi templo y reciban mis dones. Busquen aquel aquelarre que los ayude a su felicidad. No sean soberbios, por egoísmo se puede perder lo más valioso. Una bruja sin su aquelarre no es nada.

 

Hagamos un pacto: cuidemos el aquelarre y el aquelarre les cuidará.

 

No te confíes, cariño.

 


No te confíes, cariño. Puedo decorar mi palacio con corazones y estar rodeada de rosas rojas, pero mi guillotina tiene el filo del alma destrozada.

 

¡Mi poder es absoluto! Me temen, me respetan. Cree en mis palabras, si prometo una ejecución, la tendrás. Rodarán cabezas.

 

No te confíes, cariño. El corazón puede simbolizar el amor, pero verás que me amo más a mí. Mis súbditos conocen que gobierno con guante de hierro.

 

Las otras reinas eran débiles y patéticas. ¿Quién anticiparía la ironía? La reina de Espadas lloró por clemencia. Yo se la di: una muerte rápida y limpia. Tréboles y Diamantes me pertenecen.

 

En honor a la verdad, antes amé, pero, ¿de qué sirve amar si te tratan como si fueras débil? Nunca más. ¡Mi reino será grandioso! Conquistaré, con mis naipes, el reino vecino del ajedrez.

 

No te confíes, cariño. El corazón es el arma más peligrosa que existe. Traigan mi hacha personal. La bajaré como guadaña. Las cabezas rodarán y luego jugaré croquet para relajarme mientras como tarta.


martes, 16 de julio de 2024

Pequeño Hijo de la Luna

 

 


 

Pequeño hijo de la Luna recibe la bendición y el cuidado de los súcubos e íncubos al crecer, toma la inspiración de los ángeles de plumas negras y que el cangrejo estelar te proteja y el perro acuático te dé versatilidad.

Que los arco iris en negro sequen la lágrima del rostro del arlequín. Tienes cuentos que crear antes de dormir y leer en el día. Descubre tu curiosidad, sé humilde y alimenta el corazón con empatía.

Pequeño hijo de la Luna, ansioso por la vida, disfruta del vino que sirve como sacrificio para Baco. Toca los corazones ajenos y hazlos crecer.

Pequeño hijo de la Luna reclama tu corona sarcástica y viste tu hombría con las estrellas que llegan desde Marte.

El momento de bailar; es oportunidad de interpretar distintos roles sin temor ni vergüenza. Busca la paz interna mientras te aceptas.

Pequeño hijo de la Luna mira el universo con tus ojos verdes y contempla la inmensidad de lo que te rodea.

Recibe mi consejo, no dejes de buscar tu felicidad, sin importar si te critican. Pequeño hijo de la Luna sonríe y comparte tu energía. Cultiva las amistades que alimentan tu alma.

Cuatro décadas y medio lustro pasarán sin que te des cuenta. Que tus sueños te guíen paso a paso. Perdónate y perdona a los demás. Déjalos que sigan su propio camino, si así lo necesitan.

Que las serpientes te den astucia y sabiduría. Sigue las palabras sempiternas. Aleja las dudas. Ama con fuerzas, mi querido hijo de la Luna. Mira el espejo y ama lo que ves. Otros seres de luz y tinieblas te dan cariño sin miedo.

Pequeño hijo de la Luna sigue los aullidos de los lobos y los ronroneos felinos hacia tu norte. Navega en el mar que baña las costas cercanas.

Fantasía que se hace realidad, recibe un abrazo protector y un beso en tu frente de mi parte. Que el mal se aleje y tú puedas crecer, pequeño hijo de la Luna.

 

Dos ritmos

 


 

 

Escucha la canción de la parca: su voz es dulce e inquietante. Parece un susurro, pero se oye fuerte en el alma. No hay escapatoria su canto de perdición es inevitable. Todos se mueren por conocerla.

La dueña de la guadaña dará su concierto cuando menos lo esperes: así de diva es. Mientras nos convocan al evento, aprovechemos y bailemos el ritmo vital que nuestros latidos emiten. No perdamos ni un segundo. La vida no espera por nadie.

La vida avanza cuando más distraídos estamos. Sin querer ya dejamos pasar la tonada que nos motiva. Baila, sonríe, llora, pero, sobre todo, aprovecha cada respiro.

Vida y muerte, no son opuestas. Solo son distintos ritmos. Haz dueto mientras bailas. Pon tus palabras en esta percusión de liberación.

No te ocultes en la rutina. Recorre tu camino. La vida no puede ser vivida por otra persona.

Mételes pasión a tus actos. Mételes voz a tus gritos y corre así no tengas piernas.

No importa si te equivocas, corre riesgos.  Baila como si nadie te viera: si te critican son ellos los que están desperdiciando su tiempo en lugar de vivir.

Ama con el corazón. No te distraigas y retoma la cadencia de Vida. Disfruta y aprende, mientras programan la fecha del concierto letal que nos arrullará por última vez.

La vida es un carnaval de pasiones…no duermas antes de tiempo.

El lugar más sagrado

 


 

Siempre que me refugio en el lugar sagrado detrás de mis párpados, busco recargar mi espíritu.

 

Tras ese velo de piel veo mariposas bañadas por la penumbra del eclipse, escucho la secuencia de transformación del réquiem en rapsodia: percibo el aroma del pasto recién regado; saboreo la mezcla de café y chocolate y siento en mi piel la brisa del mar.

 

Mi corazón se ilumina, mis emociones se defienden con espadas buscando la abundancia mientras creo mi propia suerte.

 

En el lugar sagrado detrás de mis párpados, veo las estrellas que forman el zodiaco. La Luna y el Sol me protegen. La obscuridad me enseña. La luz me guía. El arco iris me sana.

 

Venga la inspiración. Encuentro refugio en la oración que desnuda mi alma.

 

Calma mis miedos y alimenta mis sueños. Recargaré mis energías en el lugar sagrado detrás de mis párpados. Disiparé la niebla de la confusión y enfocaré mis sentimientos en crecer.

 

Busco fortaleza, valor y sabiduría cuando me oculto detrás de mis párpados. Mis demonios internos buscan redención y mi ángel a veces quiere hacer travesuras de niño.

 

 

 

Oda a la masturbación

 


 

Se nombra como el amor propio más puro. No importa si es manual, digital o apoyado por agentes externos.

 

El placer que se tiene al tocarse así mismo es lo que conocemos desde pequeños. Sin saber lo que era, buscamos el orgasmo sano.

 

Juzgada por algunos pero practicada por muchos. Dulce eyaculación motivada por la imaginación.

 

Nadie más que uno mismo sabe lo que le gusta a uno.

 

No importa si se hace para liberar tensión o si se hace por soledad, nadie puede negar la sensación que nuestros sexos tienen al tocarnos.

 

Jóvenes y adultos; hombres y mujeres no se puede negar el autoconocimiento y la autoestima que crece.

 

En soledad o en grupo, crecemos conociéndonos para que nuestra sexualidad compartida sea demostración de amor a otros.

 

Juzga todo lo que quieras. No puedes negar que pasó por tu mente el auto placer.

 

Grande aprendizaje que llena de placer y relajación.

 

martes, 27 de febrero de 2024

El plan

 


 

Eros, quien usa su seudónimo Cupido para parecer inocente, miró a su madre Afrodita y le sonrió maliciosamente. Se acercaba el día de aquel santo que casaba parejas en secreto y tenía que aprovechar las hormonas alborotadas en sus víctimas potenciales para disfrutar más de la tortura que generaba. Afrodita miraba a su hijo con orgullo: el amor y deseo no deben ser aburridos según su filosofía.

 

El plan de Cupido para la travesura de este año era simple y cruel. Dispararía al cielo centenares de flechas de oro y esperaría que caigan aleatoriamente como una lluvia sobre los mortales. ¡Qué divertido será el caos resultante! Todos tendrían atracción con quien menos esperen: mayores y jóvenes; hombres y mujeres; mujeres y mujeres; hombres y hombres; amigos y amigos; enemigos y enemigos…. No importaba. A veces el amor empieza con el deseo así que, técnicamente, estaba cumpliendo con su trabajo. No importaba si San Valentín obtenía el crédito. Su labor le enorgullecía.

 

Todo estaba listo para el ataque. Cupido tiene invertido mucho bronce griego en negocios afines al romance: hoteles, spas, florerías y chocolaterías. Se dice que las flechas doradas no solo activan el enamoramiento, la lujuria y el romanticismo. También fomentan el consumismo de dichos productos.

 

Cupido es cruel. No le importa mucho si sus víctimas encontraron a su alma gemela o a seres tóxicos. Si en noviembre nacen muchos bebés, frutos de 14 de febrero, solo significaría que en el futuro podrá empezar el ciclo nuevamente con estos bebés cuando ya puedan razonar y desear. Su excusa es que el solo pone la semilla inicial. Ya si los mortales aprovechan eso para fortalecer un poco de Amor depende de ellos.

Bien lo dicen los mitos: Cupido es más temible que la muerte. ¡Cuidado! Veo que la lluvia de flechas ya empezó. ¡Busquen refugio!

 


Invocación

 


 

Convoco los pensamientos sin nombre que escondí en lo más lejano del universo de mi espíritu. Invoco la luz y obscuridad; la esperanza y desilusión; lo sano y tóxico. Vengan raudos sentimientos y carguen mi arma, afiliada en vida y en destrucción.

 

Llamo a la renovación y revolución del alma para aumentar mi valor, mi sabiduría y mi poder. Ruego a los guardianes me liberen para crecer.

 

Vengan corazones, diamantes, tréboles y espadas. Fusiónense para ganar la partida que tengo ante mí.

 

Digo mi nombre tres veces. Lo susurro; lo grito; lo lloro y añoro. Hierve sangre: no te pierdas en el olvido del tiempo.

 

Confesiones ocultas, venir a mi lado. Experiencias, les ordeno acompañarme para quitarme el miedo.

 

Lágrimas y sonrisas, las necesito. Vengan para purificarme. Acércame a los cruces del camino. Convoco los pensamientos sin nombre.